Un verano de titulares
- Sara Rubio
- 3 sept 2012
- 3 Min. de lectura
Ahora sí podemos cantar aquello de “el final del verano llegó”. Por suerte para unos y por desgracia para otros, la “vuelta al cole” ya está aquí. Ha sido un verano muy movidito. Podríamos decir que no hemos vivido un julio y agosto al uso. En estos meses, en los medios de comunicación, se suele recurrir a temas más frescos y veraniegos, pero sólo por un motivo, porque falta información. Pero este año ha sido distinto al resto. Ha sido, sin duda, un VERANO DE TITULARES.
La “prima” más famosa de todas no ha descansado ni por vacaciones y es que el pasado 20 de julio, al sobrepasar los 600 puntos básicos, hizo que todos los españoles se llevasen las manos a la cabeza. Muchos a sabiendas de lo que eso significaba, y muchos otros, aterrados porque la cosa “sonaba fea”.
Los “Recortes de Mariano”, o de la Merkel, según se mire, nos han tenido en vilo durante todo el verano. Sí, esos recortes con los que, supuestamente, en 2 años y medio vamos a ahorrar 65 mil millones de euros, ¡esos! La cosa está en que, mientras se ahorra o no, hay que ajustarse el cinturón. Un ajuste de cinturón que muchos opinan que no le corresponde al pueblo, al menos, no en esta medida. Pero en fin… a lo que íbamos. El dichoso IVA es sin duda lo que más nos ha movido los cimientos. Se calcula que con la subida, el gasto anual por familia, oscilará entre 415 y 600€. Un gasto difícil de asumir en muchos casos, como también lo son los otros muchos “ajustes del presi”. Y es que el Gobierno ha tenido para todos: parados, funcionarios, Administraciones Públicas, pensionistas… pocos se han quedado como estaban.
Y ajustando, ajustando… calculadora en mano, don Mariano fue rescatado, y con él, todos nosotros. Se solicitaron 100 mil millones de euros para la banca. Un dinero que hay que devolver, pero visto lo visto parece que no será el único. Próxima parada: rescate del país.
La cara más triste y dura del verano la ha protagonizado el fuego. Infinidad de familias se han quedado sin nada: 156 mil hectáreas quemadas y una decena de muertos. Duras consecuencias de unos incendios provocados por unos sinvergüenzas que, casi con toda seguridad, saldrán impunes.
Lo que sí es cierto es que la actualidad veraniega ha estado plagada de nombres propios. Mientras el etarra Bolinaga pasaba hambre en su huelga, el sindicalista y diputado de IU Sánchez Gordillo, se dedicaba a llenar carros de comida sin pagarlos. Paradojas de la vida. Mientras Breivik, el pistolero de Olso, era condenado a 21 años de prisión, el fundador de Wikileaks, Julian Assange se está librando de la justicia, de momento, gracias al asilo político que le concedió Correa. Pero para personaje, el Sr. Ruiz Mateos quien ha plantado a la jueza en varias ocasiones, pero que ha dado momentos estelares en televisión gracias a ello.
Aunque si hay alguien que ha sido capaz de poner los bellos de punta a toda España, ese ha sido José Bretón. El verano ha acabado con la confirmación de que Ruth y José fueron quemados a más de 800 grados en un horno que construyó “su papito” en la Finca familiar de las Quemadillas. Los huesos que parecían de roedores, corresponden a los niños. El “monstruo de Córdoba” ha puesto la guinda del pastel a un verano que no ha dejado indiferente a nadie.
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